Son una de las especies de caracoles más dañinas que existen. Su baba es tóxica, tanto para el contacto humano como para el cultivo y la tierra. Se trata de la achatina fúlica, una variedad gigante del molusco terrestre, que apareció sorpresivamente en una casa del barrio Yapeyú, de la ciudad de Corrientes.
La aparición del enorme caracol generó alarma entre la población y provocó que las autoridades intervinieran. El Ministerio de Producción de Corrientes recomendó no tocar a los ejemplares y no tener contacto con su baba, debido al daño que puede ocasionar, según Noticias Argentinas.
La enorme especie, comparada con otras de su misma clase, puede llegar a medir hasta 30 centímetros de largo y es altamente tóxica para humanos y animales. Incluso puede generar ceguera en nenes y lastimar gravemente a la flora nativa y cultivos.
El caracol que proviene originalmente de países con zonas tropicales y subtropicales de África oriental, es considerada una de las cien especies invasoras más dañinas del mundo y está reconocida a nivel mundial como una plaga. Incluso está prohibida en España y Estados Unidos.
Su extensión a tantos países fue posible gracias al tráfico de mascotas, con lo cual el caracol gigante llegó a lugares impensados como el Pacífico y Sudamérica, desde el África.
La particular situación que se da en Corrientes también ocurrió en Barranquilla, Colombia, donde las autoridades emitieron una alerta naranja para frenar la presencia del enorme animal en toda la ciudad.